LA HONESTIDAD POLÍTICA

Que la casta política que representa a este país no es más que un atajo de mentirosos sin la más mínima honestidad o ética lo sabe cualquiera que siga las noticias del día a día. Los dos grandes partidos, hasta ahora los únicos que han gobernado, han preparado discursos en busca del voto sin la más mínima intención de cumplirlos. Pero lo que está sucediendo en los últimos años ha colmado la paciencia de la población que ya ve a los políticos como uno de los mayores problemas del país.

Ya con la obcecada negación de la crisis por parte de Zapatero la indignación era palpable, pero hay que ver cómo se las está gastando el gobierno de la mentira del señor Rajoy: cuando dice que hay algo que no va a hacer, es mejor echarse a temblar, porque estadisticamente, basta que niegue cualquier medida para que ipso-facto la aplique, maquillando y tergiversando el lenguaje en un perfecto ejercicio de doblepensar orwelliano.